Desde la playa de Villajoyosa en las fiestas patronales, hemos asistido al desembarco de los moros el cual se represento la escena de intento de posesión de la villa.
Según cuenta la tradición, el 29 de Julio de 1538 los habitantes de Villajoyosa vieron peligrar sus hogares, sus huertas, sus vidas… al entrever en alta mar cuarenta galeras sarracenas que quieren conquistar la costa vilera.
Las campanas tocan alarma general, los vileros y vileras se preparan para la defensa. Las fustas se acercan, el fuego se intensifica y cuando la invasión sarracena parece cierta los habitantes de Villajoyosa ruegan al cielo intercesión y Santa Marta, que es el santo del día, mueve un fuerte vendaval que devuelve mar a dentro las medias lunas.
Desde aquel 29 de julio los vileros y vileras en agradecimiento proclaman a Santa Marta Patrona de Villajoyosa y, en su honor, celebran las fiestas de Moros y Cristianos con un acto único y diferenciador: El Desembarc. Un auténtico espectáculo de luz, pólvora y fiesta en el que los vileros representan este hecho histórico.
Las fiestas de Moros i Cristians de Villajoyosa, declaradas de Interés Turístico Internacional, se convierten cada año, del 24 al 31 de Julio, en un punto de encuentro para miles de personas que descubren en ellas una combinación perfecta de tradición, historia, espectáculo y fiesta en el sentido más amplio de la palabra.